Cuando compramos o tenemos una impresora en casa, sobre todo de color, tenemos la posibilidad de imprimir fotografías en casa. Pero antes de lanzarnos a imprimir fotos, es mejor tener en cuenta estos los consejos para imprimir fotografías en casa, para que el resultado sea el esperado. Sobre todo, si vamos a realizar un regalo o enmarcar esas imágenes.
Asegúrate de tener una impresora de calidad
El primer consejo que os traemos, es tener una impresora de calidad, ya sea de tinta o tóner, por lo que es mejor ver bien los puntos fuertes que tiene antes, sobre todo si la vamos a adquirir. Esto evitará comprar algo que realmente no se adapte a las necesidades o al resultado que queremos obtener con las impresiones.
Para ello, fijarse en los soportes que admite, tipos de papel o resoluciones, será clave para que las impresiones sean de calidad y perduren en el tiempo.
Usa tinta o tóner de calidad
Por otro lado, cuando compramos la impresora, nos suele traer algo de tóner o tinta para ver que tal imprime y comenzar a usarla. En el momento en que se nos agoten estos consumibles, será hora de adquirir unos nuevos. Estos podemos buscarlos en tiendas online como Ntt-toner, donde podremos encontrar el modelo de cartucho, además de ver si es uno compatible o el original.
Nosotros os recomendamos que, para obtener el mejor resultado, compréis siempre el original, así evitaréis posibles atascos o funcionamientos incorrectos de la impresora. Además de permitir imprimir en los diferentes soportes que admite la impresora. Con la tinta o tóner de calidad, también conseguiremos que los colores aguanten más en el tiempo y que no se degraden o decoloren si le incide el sol en algún momento.
Usa papel fotográfico de calidad
Por otro lado, tendremos que imprimir en un soporte de calidad. Aquí, aunque parezca que no, elegir el papel correcto marcará la diferencia entre un buen acabado o uno mejorable. Dentro de los tipos de papel que podemos encontrar para realizar impresiones de fotografías, los tenemos en diferentes tamaños y acabados, los más usados son: mate o brillante.
Es recomendable ver el tipo de papel que admite la impresora antes de comprarlo, de esta manera, conseguiremos el mejor resultado en cada impresión. Además de guardarlo en un lugar fresco, seco y libre de humedades para que siempre esté perfecto.
Ajusta la configuración de impresión
Después de tener la impresora y el papel, es hora de configurar la impresora para tener el mejor resultado. Aquí deberemos ver, tanto el tamaño de papel, como la calidad de impresión o elegir el tipo de papel, según lo que vayamos a imprimir en ese momento.
Nuestra recomendación es ir viendo los diferentes puntos de configuración que tiene la impresora, consiguiendo optimizar la impresión según el caso. De esta forma, podemos dejarla preconfigurada con unas opciones, consiguiendo imprimir sin tener que volver a realizar dicha configuración.
Utiliza el modo de impresión correcto
Como comentamos antes, dependiendo de lo que vamos a imprimir, seleccionaremos un modo u otro. En el caso de realizar una impresión diferente a las habituales, como puede ser una foto, necesitaremos prestar atención al modo en que está y si es necesario realizar el cambio de este.
No es lo mismo, imprimir un documento en blanco y negro que una foto a máxima calidad. En el primer caso, podremos usar el modo ahorro de tinta o tóner, o incluso, ponerlo a escala de grises; mientras que, en el segundo caso, es preferible elegir una buena calidad, además del papel correcto que vayamos a usar.
Prueba la impresión
Antes de hacer la impresión definitiva, es preferible hacer una serie de pruebas, de esta forma, sabremos ajustar mejor la máquina para que el acabado sea el esperado. Sobre todo, si estamos haciendo algún tipo de impresión de un determinado tamaño o en un soporte más delicado, como puede ser el papel de foto.
Usa software de edición de imágenes
Cuando queremos imprimir fotos en casa, es mejor usar un programa adecuado para que el resultado sea el más óptimo. A esto hay que sumarle que el monitor tenga bien ajustados los colores, así como utilizar programas de edición de fotos, donde podremos realizar algunos retoques fotográficos, para sacarle el máximo partido y que el resultado final sea el esperado. Además, el propio programa, podrá ajustar los colores de impresión para que esta sea mucho más realista con lo que estamos viendo en la pantalla.
Imprime en el tamaño correcto
Algo a tener en cuenta es imprimir en el tamaño adecuado al papel, deberemos de tener en cuenta que, si vamos a imprimir en un formato foto de 10 x 15 cm, tendremos que adecuar la imagen a este tamaño.
Utiliza una resolución adecuada
El contar con una buena resolución, asegurará el correcto visionado de la imagen. En fotografía, una resolución adecuada está en los 300 puntos por pulgada o más, para conseguir un acabado correcto.
Almacenamiento adecuado de las impresiones
Por último, una vez realizada la impresión, deberemos guardar esta en un lugar que perdure en el tiempo, como en un lugar sin humedad o que no esté expuesto a los rayos solares. De esta forma, evitaremos que las fotografías se degraden o pierdan color con el paso del tiempo.
Finalmente, esperamos que siguiendo estos consejos para imprimir fotografía en casa obtengáis fotos de calidad para vosotros o para regalar.
