La empresa coreana Samsung lleva ya desde el año 2013 diseñando y lanzando dispositivos con un denominador común: una pantalla curva, y el Samsung Galaxy Note Edge destaca precisamente por este elemento. Este Phablet es una versión mejorada del Galaxy Note 4, que incluye nuevas funciones y un nuevo diseño que se caracteriza por presentar una pantalla curva en su filo.
El Samsung Galaxy Note Edge mide 151,3 x 82,4 x 8,3 mm, pesa unos 174 gramos y su chasis está fabricado de plástico. Cabe decir que en esta ocasión, Samsung ha ubicado el botón de encendido en la parte superior, lo cual puede resultar incómodo, y el altavoz se sitúa en la parte trasera, cuando estaría mejor en la delantera o en el lateral, ya que ahí puede ser tapado con bastante facilidad.
Su pantalla consiste en un panel AMOLED de 5,6 pulgadas y resolución QHD de 1600 x 2560 píxeles que reproduce las imágenes con colores intensos, llenos de matices, y niveles de saturación y contraste muy precisos. Todo este panel es un continuo, pero a nivel de software, es considerado como dos pantallas diferentes: la estándar y la curva del lateral.
Esta segunda pantalla curva o “Edge” se extiende a lo largo del marco derecho del terminal y presenta sus propios controles y accesos rápidos a aplicaciones y notificaciones, pero siempre podremos personalizarla con nuestras imágenes. Este panel cuenta con una interfaz especial denominada Revolving UI que ofrece nuevas posibilidades para interactuar con el dispositivo, aunque hay que decir que resulta bastante incómodo para las personas zurdas. Si se desliza el dedo de arriba abajo en esta pantalla, tenemos una ventana de herramientas con accesos rápidos a la linterna, grabación de voz, cronómetro y una regla.
Con esto, el Samsung Galaxy Note Edge está pensado para facilitar nuestra interacción y comunicación, pudiendo ver en el margen lateral nuestras alertas y notificaciones, sin que tengamos que destapar el dispositivo, o a la vez que visualizamos un vídeo en su pantalla principal. También podremos descolgar el teléfono si nos llaman y ver la hora y el clima aunque tengamos el Phablet en standby. Sin embargo, cabe indicar que con este sistema podremos tener una redundancia de notificaciones y llegar a ver algunas repetidas, dado que éstas también seguirán apareciendo en la barra de notificaciones que tiene Android por defecto.
Por otro lado, este Galaxy Note tiene en su interior un procesador Snapdragon 805 Quad Core de 2,7 GHz, 3 GB de memoria RAM, 32 GB de almacenamiento ampliable hasta 64GB mediante tarjeta microSD, WiFi, acelerador de descargas, tecnología NFC, Bluetooth 4.1, GPS, puerto USB 2.0 y MHL 3.0, Sistema Operativo Android 4.4 KitKat, distintos sensores y batería de 3000 mAh con carga rápida, la cual dura algo menos que la del Samsung Galaxy Note 4.
Además, también hay que destacar su cámara trasera de 16 megapíxeles con HDR y estabilizador óptico Smart OIS, que logra unas fotos muy luminosas y de gran calidad y permite grabar en 4K, y su cámara frontal de 3,7 megapíxeles con lente F 1,9.
Por otra parte, el resto de características y aplicaciones presentes en este dispositivo de Samsung, son prácticamente las mismas que presenta el Galaxy Note 4, donde destaca el S Pen como el complemento perfecto y la función multitarea.
Finalmente, cabe decir que el Samsung Galaxy Note Edge viene siendo como una actualización del Note 4 con un diseño distinto y algunas funciones nuevas que conlleva todo ello a un aumento de precio bastante notorio, ya que este nuevo terminal cuesta entre 850 y 900 euros.