El pasado 6 de octubre, Microsoft nos sorprendió a todos en el evento que realizó para presentar sus nuevos buques insignia, que podéis revivir aquí por si os lo perdisteis en su momento. Y es que además de muchas novedades que ya se esperaban, Microsoft dio un golpe de efecto cuando realizó la presentación de su propio portátil: el Surface Book.
Quizá el hecho de llamarlo “portátil” es algo equivocado, pues se trata más bien de un equipo convertible del estilo tablet-portátil, pero al que los de Redmond han sabido darle una vuelta de tuerca para sorprender con un equipo espectacular que reúne una serie de características realmente interesantes. Y es que el Surface Book luce como un portátil de siempre, pero una vez que realiza el truco de la pantalla nos damos cuenta de que estamos ante un tablet convertible.
Surface Book, inclasificable y soprendente
Hay quien desea encuadrar a este Surface Book dentro de alguno de los ámbitos que ya conocíamos pero creemos que esto no es posible ya que creemos que ha abierto un nuevo segmento que hasta ahora no se había explorado, si bien es cierto que recuerda mucho al MacBook Pro, al cual supera en potencial, o también al Dell XPS o al Lenovo Yoga 3 Pro, aunque el Surface Book resulta algo más pesado.
Para despegar el teclado de la pantalla deberemos pulsar una tecla para desbloquear el sistema de agarre, y para colocarla en su sitio de nuevo no notaremos ningún click, ni ningún golpe de imanes, no parece complicado pero habrá que pillarle el truco para poder hacerlo sistemáticamente.
La pantalla creemos que supone un gran acierto, pues son 13,5 pulgadas que ofrece un formato 3:2 que da como resultado un equipo más alto de lo normal pero con el que resulta cómodo trabajar, ya sea en el modo portátil o en el modo tablet. El equipo no se nota pesado si lo usamos en formato tablet (725 gramos), de hecho es más ligero que el Surface Pro 3, y llama mucho la atención el potencial que ofrece teniendo en cuenta su mínimo grosor.
Además, Microsoft ha dado en el clavo al esconder una GPU en el propio teclado, que además incorpora en su interior una batería extra con la que poder alcanzar las 12 horas de uso, lo cual no está nada mal para un portátil.
En definitiva, este Surface Book de Microsoft nos parece que ha sido todo un acierto y desde luego no ha dejado indiferente a nadie.